Gracias a Rubén, por fin tengo un borrego. Es un borrego de nube y, según me han dicho, no se alimenta ni de gatos ni de rosas ni de baobabs, sino de malos sueños. Con un soplo se infla, con otro ya es otra cosa...

2 comentarios:

Luis Gonzalí said...

Ese borrego tambien sirve para ser contado y dormir?? o sólo para comer malos sueños cuando uno ya ha contado borregos ordinarios??

Elizabeth said...

Pues podría usarlo para ser contado, el problema es que tengo que estar soplando mientras cuento para que se siga haciendo otro y otro y otro borrego. Por eso nada más lo dejo volar bajito, y se come los malos sueños y también cuida que los otros borregos, los que cuento, vuelvan a formarse cuando ya terminé.